HUERTOS

Éstas y más recibimos el martes, la etiqueta que veis es porque el proveedor nos cuida, en ella indica en cada bolsa la variedad de naranja y el nombre de la compradora, desde luego no hay confusión alguna. Están ricas, muy ricas, aunque cabe decir que por el clima poco invernal de este año no llegan a alcanzar el dulzor de las del pasado invierno.....yo diría que aquellas fueron milagrosas.  Hay que ver cómo nos lleva este cambio climático de cabeza, creo que por fin ya todo el mundo se da cuenta de que no es ninguna tontería y así hay que educar a nuestros hijos, informándoles y desde muy pequeños creándoles buenos hábitos. Y sino mirad qué se consigue a través de la primera plataforma de Crowdfunding para huertos escolares ecológicos, aquí va uno de Madrid que alcanzó la financiación necesaria y parece una gozada, míralo con tranquilidad que merece la pena, en otro colegio de Alzira, Valencia, los niños soñaban con un gallinero y lo lograron. Y bien, esto significa que si nos implicamos todos un poquito, cada uno a su manera, que las hay muchas, y en su medida,  los sueños se pueden lograr y las generaciones futuras tal vez respeten más a la Madre Tierra de lo que hizo la nuestra.

Au revoir.......lo sencillo me espera